¿ Sorbetes de Manzanilla o Fino ?

Cuando todos los mimos y cuidados desaparecen en la nevera

Hoy me siento como el actor de cierto anuncio de cerveza, en la que un camarero al servir una cerveza no tiene en consideración el esfuerzo de todas las personas implicadas en la producción del producto para que al final se pueda disfrutar de una excelente cerveza..

” La gente se lo bebe too…”

Así me sentí, cuando unos días atrás observe con estupor como un camarero en un tabanco en Jerez sacaba de su nevera una botella de manzanilla la Guita y servia un sorbete , seguí con la mirada el camino de esos dos catavinos hasta su destinatarios y pude comprobar que estos no ponían ninguna cara rara al consumir su contenido. Pero no fue esta la única ocasión en la que se sirvió este tipo de sorbete, luego llegó el turno a mi querido Tio Pepe, confieso que nunca he sido de quedarme callado y así que le pregunté al camarero si era costumbre de la clientela el pedir sorbetes de vinos generosos, su contestación fue que “ la gente se lo bebe too

Mínimo de dos años bajo velo de flor

Es cierto que la gente quizá por desconocimiento o por conformismo se lo bebe todo, pero creo que tenemos que combatir este tipo de sorbetes. Una manzanilla fina necesita un tiempo de crianza mínimo de dos años bajo el velo de flor para poder disfrutar de aromas florales , de almendra y aromas de panadería, lo mismo que el fino que necesita un mínimo de dos años de crianza, y ya no hablemos del tiempo de crianza de un oloroso, de un amontillado, de los cuidados de los vitivinicultores a las vides, de la selección de la uva en la vendimia, de destinar una primera yema para los finos más finos, de los controles de las botas en las bodegas, del filtrado del producto antes de su embotellado, de buscar una estética y una etiqueta acordes, para que al final ese producto tan cuidado y tan mimado termine en unas neveras con un descontrol de temperatura y que desaparezcan todos los aromas y gustos.

Temperaturas de servicio

Es cierto que si hablamos de temperaturas de servicio, estas se tienen que adaptar al clima en que se realiza el servicio, o al tiempo en que tardará la copa en ser servida en la mesa, y que no es lo mismo servir un amontillado a temperatura ambiente en verano en Jerez que realizarlo en invierno, podemos decir que podemos ser un poco flexibles en las temperaturas del servicio según las circunstancias, pero lo que no se puede admitir son los extremos como servir un fino o una manzanilla totalmente congelada a no ser que te quieras comer un helado.

Hola, 👋
Encantados de conocerte.

Regístrate y no te pierdas las nuevas entradas del blog.

¡No hacemos spam! Lee nuestra política de privacidad para obtener más información.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *